miércoles, 13 de marzo de 2013

Anécdotas de un mejillón y una leona ( IV )




Superstición teatrera y Benavente triplicado

El teatro está lleno de supersticiones. Las supersticiones suelen tener sus orígenes en hechos racionales.  Hoy en día se dice - lo dicen las personas supersticiosas - que derramar la sal trae mal suerte. Este "respeto" por la sal viene de cuando tal condimento era un bien muy preciado con el que se podían comprar otros muchos productos. De ahí nació la palabra "salario" Queda claro, por lo tanto, que en aquellos tiempos era un auténtico problema quedarse sin sal. Vamos, que a nadie se le ocurría tirarla.

Volvamos al teatro: Quizá sepan ustedes que los actores se desean suerte diciendo "mucha mierda!", o "te deseo mucha mierda!", o "que tengas mucha mierda!" También esta expresión tiene un origen racional. Situémonos en tiempos de Lope y sus contemporáneos, cuando la gente acudía a los corrales a presenciar obras en verso. La chusma se acercaba a patita, pero los nobles y funcionarios de alto rango lo hacían a caballo, en coches de alquiler o en coches privados. Y por gracia de los caballos de los jinetes y de los caballos que tiraban de los carruajes, los caminos se llenaban de bostas ( mierda de caballo ) Los cómicos y las cómicas auguraban que iban a tener mucho público cuando en las inmediaciones del corral de comedias se veía mucha mierda. "Hoy hay muchísima mierda, vamos a tener lleno el corral"





  


Luis Romero Gaona, "Yuki", tenía el mejor teatro portatil de comedias de aquella época ( años setenta del pasado siglo ) con un extenso reperterio y grandes "fines de fiesta" de variedades. Estuve actuando en su carpa muy poco tiempo, apenas una semana, porque no nos pusimos de acuerdo en las condiciones, no en las económicas, sino en el tipo de trabajo.
Su teatro, digo, era envidiado por otros empresarios de carpa. Su roulotte vivienda, similar a la de Angel Cristo, era lo máximo en tamaño, confort y lujo. Estando dentro de ella te sentías como si estuvieses dentro de un chalet.
Bien, pues el teatro se llamaba "Teatro Benavente", y aquí llega la anécdota:
Al igual que en las demás compañías de carpa, no podía faltar en el repertorio "La Malquerida", el gran drama rural de Don Jacinto Benavente. Y también era usual, al igual que en las demás empresas, anunciar la función con la megafonía de un coche recorriendo las calles de los pueblos. ( A mi me tocó "pregonar" por el micrófono muchísimos días con el coche del Teatro Popular Español y del Teatro Regional )
Pues vean ustedes como sonaba la megafonía del Teatro Benavente en una famosa localidad zamorana llamada... Benavente: "Querido público de Benavente... hoy, en el teatro Benavente, presentamos la obra La Malquerida de Jacinto Benavente"






4 comentarios:

  1. Je je je... La gente no sabe el origen del "¡Mucha mierda!". Algunos lo aceptan por haberlo oído, aunque sin saber de qué va, y otros ponen mala cara, como si te desearan mala suerte, ¡juas!

    La profesión de actor es dura y gratificante al mismo tiempo, conque si se puede tener una casa rodante, un espacio propio, en vez de ir de pensión en pensión, o de hotel en hotel quien se lo pueda permitir, ya cambia mucho y es un lujo.

    Buena anécdota lo del Benavente por triplicado, je je je...

    ¡Tenga usted buen día!

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  2. Hay otra superstición de desear buena suerte que creo que es importada del extranjero porque yo no la había oído hasta hace poco. Tengo que enterarme de su origen. "Que te rompas una pierna!" La de la mierda me cae simpática, pero esta me da un poco de yuyu.

    Pues buscando fotos he comprobado que esta familia sigue y que el que lleva la voz cantante ahora, osea, dirigiendo la empresa, debe ser el hijo de "Yuki"

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  3. Valga la redundancia, nunca mejor dicho

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  4. Redundancia total, señor periodista, aquí si que vale la redundancia, no se puede evitar.

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Lamentamos que exista moderación de comentarios, pero es necesario debido a ciertos anónimos muy persistentes.